Diseño y desarrollo de identidad visual.

DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO:

El cliente se contactó con la necesidad de capturar la esencia Villa 25 de Mayo (lugar donde se encuentra el restaurante) en su nuevo restaurante. Situado en este histórico lugar, deseaba transmitir las tradiciones culinarias arraigadas en la comunidad local: platos emblemáticos, sabores auténticos y costumbres compartidas. Sin embargo, también aspiraba a destacarse entre la competencia, resaltando su singularidad y ofreciendo una experiencia gastronómica única que capturara tanto el corazón de la región como la atención de sus comensales. Este proyecto no solo buscaba crear una identidad visual, sino también contar la historia viva de un lugar a través de cada detalle del diseño.

RESULTADO:

El resultado obtenido fue una marca vibrante y evocadora, donde cada elemento visual cuenta la historia de Villa 25 de Mayo. La versión principal de la marca está meticulosamente diseñada con iconografía integrada en cada una de los caracteres que componen al nombre. Donde se comunican los puntos turísticos emblemáticos, los sabores autóctonos de la región y la fauna más representativa. Esta versión principal al muy detallada, tiene algunas limitaciones de aplicación, por lo que se diseñó una versión simplificada de la marca para tener flexibilidad.
Esta identidad visual no solo logra diferenciar al restaurante de sus competidores, sino que también encapsula la esencia única y la rica historia cultural del lugar, invitando a los clientes a vivir una experiencia gastronómica enraizada en la tradición y el encanto de Villa 25 de Mayo.

Elección de color

La elección de los colores blanco y negro como principales transmite elegancia, sofisticación y atemporalidad, reflejando la tradición y la historia del lugar. El blanco simboliza pureza, limpieza y frescura, ideal para evocar la cocina fresca y auténtica del restaurante. El negro añade un toque de refinamiento y seriedad, creando un contraste que resalta la calidad y exclusividad.

Los colores secundarios de acento, como el amarillo y el fucsia, se utilizan estratégicamente para añadir vitalidad y energía a la comunicación visual. El amarillo transmite calidez, amabilidad y optimismo, mientras que el fucsia aporta un toque de creatividad y modernidad. Estos colores no solo complementan el blanco y negro, sino que también ayudan a captar la atención y a diferenciar la marca, manteniendo una coherencia visual en toda la comunicación.

El diseño obtenido es óptimo en todos los aspectos, cumpliendo con los siguientes requisitos fundamentales.